¿Te sientes identifica?
Inicia hoy, e involucra a tus hijos ya que además de tener hábitos saludables, ellos te verán competir, y podrán vivir ese ambiente que se respira en las carreras, el compañerismo, se darán cuenta que correr no solo un deporte, si no es tu estilo de vida, un modo de ser mujer y avanzar en estos tiempos de lucha por igualdades aun no conseguidas.
1. Empieza poco a poco: La realidad es que tu cuerpo ha cambiado!!
Lo lamento, no te han dejado como Kim Kardashian, así que para recuperar ese hermoso cuerpo tenemos que ir poco a poco, incluso empezar caminando, aumentando el ritmo y dejar que ese cuerpo que tan bien hemos aprovechado en maternidad: gestar, parir, alimentar… vaya poco a poco fortaleciéndose.
2. Cuidado que se puede volver en un vicio:
El running engancha…sobre todo si hace años que no tienes en tu vida un espacio para ti misma, salir a correr te hará sentir genial, te llena de endorfinas. Una de las ventajas es que estas haciendo algo por ti y para ti, por ello no querrás parar y a solo seis meses te verás corriendo un medio maratón.
3. Cuidado de no lesionarte:
Si algo caracteriza a las madres es que tienen una fortaleza mental a prueba de balas y si dicen que la acaban, lo hacen sin importar las señales de su cuerpo, y esto puede ocasionar una lesión.
4. No tienes que parecer una runner para ser una runner:
Está permitido ir con él bebe en la carreola, así tu hijo disfrutara contigo la carrera y pasaras tiempo haciendo lo que te gusta.
5. A mucha gente, sobre todo a los que no corren, les va a dar igual lo que corras o dejes de correr, recuerda que a la única que tienes la obligación de agradar es a ti misma.
6. En medio de cada carrera te estarás diciendo a ti misma que nunca más LO VOLVERAS HACER y a los 30 minutos de terminar ya estarás buscando en Internet tu próximo reto.
7. Por tu mente pasara que eres totalmente LENTA para ser una corredora.
8. Correr se trata casi tanto de fortaleza física como de fortaleza mental.
Nunca vas a olvidar el momento en el que cruces la meta de tu primer Maratón o Medio Maratón, en el que tus hijos se arrojen contra ti para felicitarte, llenarte de abrazos y besos. Nunca olvidarás que tu marido tuvo que viajar con ellos más de 100 kilómetros a primera hora de la mañana y encontrar sitio entre la multitud solo para verte llegar y sentirte ORGULLOSOS DE TI.